Delirante situación, con ulteriores consecuencias, en la que accidentalmente me he visto involucrado esta mañana y que,
a posteriori, y no sé muy bien porque, [mod_captainovbius_off] he asociado mentalmente con una anécdota que recordaba haber leído hace ya hace algunos años en la
autobiografía del gran Paco Rabal.
"Paco Rabal, si yo te contara.
Hace tan solo un rato, en uno de esos extraños momentos de calma
chicha en casa, me he acordado del tema y me ha dado tiempo de
tirar de
biblio. Localizado el libro y después de hojear y releer algunas partes, la he encontrado.
Durante sus largas estancias en París, mediada la decada de l960, Paco Rabal, tuvo ocasión de relacionarse social y profesionalmente con actrices como Brigitte Bardot, Jane Lane, Merle Oberon, Catherine Deneueve o Ingrid Thulin. Esta última, una de las musas del director Ingmar Bergmag, disfrutaba por aquellos días del éxito de una de sus películas más conocidas,
El Silencio. Pues bien, en una fiesta que daba
Alejo Carpentier fue presentado a la Thulin...así lo narra en primera persona:
(...)Congeniamos, nos caíamos bien y tuvimos una aventura. Yo había estado hacía poco con una muchacha que conocí en una discoteca y me contagió una blenorragia, pero Passalía me llevo a una farmacia de un amigo suyo italiano, donde me dieron unas inyecciones nuevas, muy potentes, y me aseguraron que con tres estaba curado, cosa que parecía ser verdad, porque me examiné y no supuraba ya ni nada.
Confiado en el poder de las inyecciones, tuve el atrevimiento de acostarme con Ingrid y, durante la noche esa de amor, que por cierto, recuerdo con mucho agrado, llamaba su amante -que era un productor italiano- constantemente.
---- ¿Qué haces? ¿Estás con alguien? ¡Te lo noto, estás con alguien!
Esa intuición de los celosos, que a veces aciertan.
---- ¡Voy para allá!
Y yo le hacía señas a ella de que no viniera, de que lo convenciera, y ella:
---- No, no vengas, que a lo mejor yo mañana voy para Roma.
El caso es que ella, acariciándome, notó el olor de la blenorragia y me dijo:
---- ¿Hace mucho que has estado con una chica?
Y yo le dije:
---- Si, hace ya tiempo.
---- ¿No estarás enfermo? Noto aquí una cosa rara.
Y yo:
---- No, no.
Al día siguiente llego el amante y tuvo que venir Antonio como un tiro a buscarme con un coche, de amanecida, y fuimos a desayunar a un café de los Campos Elíseos, yo con un salto de cama, una bata de ésas, que me quedé de recuerdo.
Por entonces quisieron contratarla los productores de
Oscuros sueños de agosto, de
Miguel Picazo, para hacer la película conmigo. Pero, amigo, sucedió que le contagió al italiano cuando vino a París y luego cuando se fue a Suecia contagió a su marido. El italiano se puso hecho una furia. Ella le dijo que había sido un actor español de cuyo nombre no se acordaba, pero él me descubrió(...)El hombre aquel juró matarme y al parecer anduvo buscándome, pero luego se le pasaría el disgusto(...)
Paco Rabal recibió una carta de la Thulin, escrita en italiano, en la que le dejaba mostrar, y con toda la razón, su enojo:
(...)"Imbecille, ¿por qué me engañaste, por qué no me dijiste que estabas enfermo? ¿Tú sabes que en Suecia existe una ley que se llama
Lex veneris? Léetelo bien,
Lex veneris...-parece que en la frontera la examinaron, no sé que jaleo-...y he contagiado a mi marido y a mi amante, no sé porque has hecho esto...". y me recordaba: "Por favor, si te acuestas con otra, haz el favor de avisarle antes, sánate antes de acostarte con otra chica"(...)
Hasta aquí la anecdota. El yo asociarla con i.e.: esa madre completa y totalmente segura, vamos, al
loro totá²,
[sic] de todo lo concerniente al comportamiento sexual de su hija de 17 años, por la sencilla y muy convincente razón de que, de vez en cuando, suele
hablar con ella de
éso, y que la niña no le mentiría y que tras comunicarla el diagnóstico de infección por gonorrea de la niña, va, y exclama a grito pelado y como muy indignada:
"¡¡¡ehh!!! ¡hoygan!..¡que mi hijita aun es muy virgen y no me la ha follao nadie...si, bueno, sale con sus amigos y amigas...pero, son todos del instituto...!", es otra anécdota.
En Madrizz, a tantos, de tantos, de tantos.