miércoles, junio 25, 2008

La historia de la sala que aloja el servidor

Por razones de finalización del contrato de arrendamiento una empresa debe abandonar el lugar de trabajo que en la actualidad ocupa. La suerte les acompaña porque un piso más abajo, en el mismo edificio, existe una oficina libre; pero hay un problema en esa ubicación, no existe un lugar debidamente apropiado para alojar el servidor salvo realizar una fuerte inversión en acondicionar debidamente una nueva sala, por lo que la propiedad y los ejecutivos se reúnen para encontrar una solución.

La encuentran manteniendo el servidor en la sala en la que se haya pero efectuando una pequeña remodelación. Ahora bien, para acceder a la misma deben atravesar todo el espacio de los nuevos inquilinos, con la consiguiente invasión de la privacidad. Llegados a este punto la dirección del edificio propone una peculiar medida:
Hola:

Como saben Vds., hay un nuevo arrendatario que se ha trasladado a una de las suites del segundo piso. El acceso al servidor a partir de ahora se realizará a través de un aseo de señoras.

Habrá una señal en la parte de las damas que puede ser cambiada de abierto a cerrado y viceversa.

Todo lo que necesitan para acceder al servidor es cambiar la señal a cerrado y cuando hayan terminado, por favor, vuelvan a poner la señal de abierto.

Una vez dentro del aseo, tendrán acceso a la habitación del servidor a través de una puerta cerrada. Por favor, atranquen la puerta antes de entrar solo por si acaso alguien no se percata de que el cuarto de baño no está operativo.

Sé que no es la solución ideal pero si seguimos este protocolo no creo que nadie se vea perjudicado.

Gracias y hagánme saber si tienen alguna pregunta al respecto.

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Dirección del Edificio


No me quiero imaginar la longitud de la cola de churris esperando a la puerta del cuarto de baño, y aun menos los comentarios, el día en que por la razón que sea alguien deba estar mucho tiempo en el cuarto del servidor. x'D

The daylywtf

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