Una tacita de café cremoso

El café está más que integrado en nuestras vidas. Concretamente en mi profesión hay alguno/a que, hasta que no se ha tomado el tercer café del día, no se le puede considerar ser humano, y gruñe, farfulla y arroja material clínico a su paso. O sea, que más de uno/a adora el café por encima de todas las cosas, y ríete del síndrome de abstinencia que producen otras substancias a priori más dañinas para el organismo. Aunque una cosa es depender del café y otra muy distinta es echarle fotitos a cada taza de café que nos tomemos. He exagerado un poco la situación, pero me sirve para presentar este sitio web que me he encontrado racaneando esta mañana por La Red.

Un fotolog hecho gracias al esfuerzo y dedicación artística de, entre otros, los empleados de la compañía Victrola Coffee&Arts radicada en una de las ciudades más cafeteras del planeta. Si, estoy hablando de la ciudad donde está ubicada la sede de Starbucks y algunas otras más, entre ellas una que no mencionaré. Ubicada en el estado de Washington, Seattle, conocida también como la ciudad del grunge es una ciudad llena de atractivos que incluso fue nombrada la mejor ciudad estadounidense en 2005 para acceso a conexiones inalámbricas a Internet y que si no fuera por la cantidad de lluvia que suele caer a lo largo del año sería ideal para vivir, y si no que se lo pregunten al psiquiatra Frasier Crane. Para aquellos que no conozcan esta extraordinaria serie de TV, tan sólo decir que ha estado emitiéndose ininterrumpidamente en EE.UU., durante veinte años 1984-2004 y que destaca por un humor inteligente y corrosivo.

Pues, bien, es sabido que una de las variedades de mayor aceptación es el café cremoso, casi un fetiche para algunos que quedan embobados viendo cómo la crema de la máquina cae sobre su oro negro ¿..! Por otra parte, también está más que asumido que la variedad "Crema" es la única forma potable de tomar café medianamente decente de muchas de las máquinas que se encuentran en hospitales, oficinas, ministerios, etc. O sea, mejor tomar un café de esos antes que otro, que directamente te empuje a propulsión hacia el WC más cercano. Sea como fuere, lo de la crema cayendo en el vaso tiene cierta gracia, al menos para estos usuarios que hacen fotos a las graciosas y serenas formas que toma la misma al entrar en contacto con el café. O sea, fotos de café con leche, enfocadas concretamente en las formas de la cremita. ¿Que he dado demasiadas vueltas para explicarlo? Ah, pero ¿y el suspense...?

Nada que ver con este otro tipo de café que ha brotado desde el fondo de las insondables y vaporizadas alcantarillas de la ciudad de los rascacielos gracias a la creatividad de la compañía de publicidad Saatchi & Saatchi, que ha convertido algunas de las alcantarillas de Nueva York en anuncios de Folgers. ¿Una idea brillante?..pues no sé que decir.